Es una copia de El Emperador en la batalla de Mülhberg de Tiziano. Según María Kusche en su libro "Retratos y retratadores" sabemos que por orden de Felipe II, Sánchez Coello copió Don Juan (de Austria) un retrato ecuestre del Emperador ecuestre. Este cuadro se le confiscó a Antonio Pérez. Su calidad y tamaño hace de esta versión una muy buena copia del original. A `pesar de varias diferencias con éste, Coello sigue captando la grandiosidad de la figura. La obra constituye un icono propagandístico de la imagen imperial de Carlos de Habsburgo. En él, El pintor italiano dió forma a un sobrio prototipo de la majestad y heroicidad del príncipe renacentista, que trascendería como modelo artístico y como imagen del poder, adoptada por las dinastías europeas y sus pintores en la Edad Moderna. El retratado lleva una armadura ligera, con traje de campaña y el morrión abierto. El emperador es pintado como un rey guerrero, arropado por los referentes clásicos de la tipología ecuestre, pero en una nueva guerra que él domina. Don Juan de Austria era hijo natural del Emperador con Bárbara de Blomberg. Su existencia fue secreta hasta 1559, cuando fue presentado a su hermano consanguíneo, el rey Felipe II. Luchó con éxito contra los piratas africanos y también reprimió la sublevación de los moriscos en Granada. En 1571 ganó la batalla de Lepanto contra los turcos, conquistó Túnez y en 1576 Felipe II le transfirió el gobierno de los Países Bajos.